Resumir este viaje en pocas palabras: MAGNÍFICO Y BIEN ORGANIZADO. Os daré más de detalles, porque la experiencia lo vale.
El viaje fue un regalo para mi padre que cumplió 80 este año y como hacía mucho tiempo que no nos habíamos atrevido a viajar en avión tan lejos con Dani mi hijo y su “motosilla”, pues me decidí a buscar ayuda.
Fuisteis encantadores desde el primer momento, tanto en el contacto por teléfono, mails, etc como por la preocupación que Dani estuviera bien asistido.
Nuestra semana comenzó con unos días en Bergen. La ida en avión nos resultó pesada por una escala en Londres, pero la asistencia de Dani, perfecta; mi gran preocupación era encontrarme su silla de ruedas “entera” al recoger el equipaje en el aeropuerto (por la ventanilla veía cómo trataban las maletas y me estaba “muriendo”)….
Pero salvado ese paso y sin desperfectos… a por los Vikingos !!
El hotel propuesto: una maravilla, la habitación: genial (con adaptación normalita: silla de ducha) y un desayuno: mmmmm, excelente. Las visitas que teníamos contratadas en Bergen se desarrollaron admirablemente y desde el primer día empezamos a disfrutar tanto de los lugares, como de la amabilidad y educación increíble de los Noruegos. La visita del Fiordo de los Sueños es una auténtica maravilla, la mezcla de buena organización, cariño hacia Dani y atención con nosotros en todo momento, hizo que el recorrido en ferry (6h) mas los dos trayectos de tren (otras 3h) se transformaran en algo mágico!
El tiempo no nos acompañó, pero estábamos avisados y preparados como “cebollas con paraguas”, poniéndonos capas y quitándonos capas cada 5min, no puede estar todo tan bonito y tan verde si hiciera el calor de España!
La segunda parte del viaje se desarrolló en Oslo y volvimos a sentir el mismo cariño y profesionalidad, tanto en la organización del viaje como en la sonrisa de cualquier camarera, taquillero, barquero, noruego, vikingo, cajero de supermercado, etc… La guía hispana qué contratamos nos cuidó de manera excepcional: sus horas de trabajo se transformaron en una fuente de información dada sin exceso y con “mimo latino”. Todo el recorrido fue adaptado a Dani (y su motosilla capaz de sortear adoquines y rampas) y a mis padres que caminaron (18 km) con pasión y sin ampollas, jajjaja… Gracias Victoria!
El hotel también nos gustó, aunque era un poco más antiguo, pero céntrico, cosa que se agradece después de 18 km a pié de algunos días, os lo aseguro.
Vuelvo a insistir sobre vuestra profesionalidad que nos permitió disfrutar de una semana llena de sorprendentes contrastes y bellísimos parajes, gracias equipo y animo a los que me lean, que se lancen a la aventura, a descubrir el mundo!!!!
Zoraida Grande
Nuestro viaje familiar a Berlín organizado por Travel Xperience ha sido fantástico, desde el inicio con los preparativos y luego allí en destino con los traslados
